Descubre Nuestra Historia: La Pasión Vinícola de la Bodega San José

En el vibrante tejido histórico de la ciudad de Badajoz.

La figura de José Doncel Sajara

la figura de José Doncel Sajara emerge como un icono de la tradición vinícola y el comercio arraigado en la comunidad. En el año 1920, Don José Doncel Sajara, un apasionado cosechero, fundó lo que hoy conocemos como la Bodega de San José. Inicialmente, su actividad se centraba en la cuidadosa elaboración, pisa y venta al por mayor de vino, estableciendo su lagar en un lugar emblemático, junto al Convento de las Adoratrices, en lo que hoy es la calle Suárez de Figueroa.
Con el paso del tiempo y su incansable dedicación, Don José trasladó su negocio a la plaza de San José, esquina con la calle San Pedro de Alcántara, un enclave estratégico que facilitaba la distribución de sus selectos vinos por toda la ciudad. Vivía en el principal de la bodega, lo que le permitía controlar minuciosamente cada aspecto de su negocio y mantener el legado de calidad y excelencia que lo distinguía.

Además de su compromiso con la elaboración y venta al por mayor, Don José también incursionó en la apertura de establecimientos emblemáticos, como "El Sótano", situado en la calle Echegaray 9, un espacio que se convirtió en punto de encuentro para los amantes del buen vino y la buena compañía. Este establecimiento se erigió frente a la ubicación original de "El Sótano", que se encuentra en la calle Virgen de la Soledad, consolidando así la presencia de la familia Doncel Sajara en el corazón de la vida social y gastronómica de Madrid.

En la Bodega de San José, nuestra pasión por el vino y el legado de calidad perdura hasta el día de hoy. Continuamos honrando la memoria de Don José Doncel Sajara, manteniendo vivo su espíritu emprendedor y su compromiso con la excelencia en cada botella que lleva nuestro nombre. Somos más que una bodega, somos una institución arraigada en la historia de Madrid, y nos enorgullece seguir sirviendo a nuestra comunidad con el mejor vino y la calidez de nuestra hospitalidad.

Bodega San José